Últimamente mi pobre marido anda súper quemado. Se le pierden las cosas o le roban. La semana pasada se le desfondó una bandeja completa de 30 huevos y obvio, se rompieron todos; además, en la oficina alguien abrió una ventana y voló una pila de papeles importantes con una ráfaga de viento y tuvo que ir a recolectarlos al pasto 5 pisos más abajo. (¿a quién le pasa algo así?). Hoy en la mañana botó por equivocación el carbón del asado de la noche y por si fuera poco, a medio día, pisó la pantalla de su computador NUEVO y la rompió.
Entonces, ¿Existe la mala suerte? Yo creo que sí. No tengo una explicación lógica, pero hay gente a la que, simplemente, las cosas no le resultan. Ahora, también creo que hay parte de responsabilidad de cada uno, o sugestión, o como quieran llamarle. Creo que si te convences que te pasarán cosas malas, estarás predispuesto a que así sea, o peor aún, a ver sólo las cosas negativas omitiendo la serie de cosas buenas que te pueden ocurrir. De todas maneras, creo que las «malas rachas» son parte de la vida. Personalmente, pienso que no se puede ser feliz todo el tiempo, así como no todo sale bien siempre. Siento que lo más importante es cómo afrontas la mala suerte, con qué herramientas cuentas para sobrellevar estas situaciones desagradables. Por nuestra parte, sólo nos queda respirar profundo y pagar la pantalla del compu, comprar más huevos y seguir adelante, total, más allá del mal rato, estamos bien y nuestros amigos le han hecho suficiente bullying para que se tome las cosas con humor. Y a ustedes, ¿Los ha perseguido la mala suerte?
El Blog de Chirimoya Alegre 